Si la llave de la puerta no gira, primero intenta verificar si la llave está en buen estado o si está sucia. Si la llave está en buen estado pero aún así no gira, puedes intentar los siguientes pasos:
- Lubrica la cerradura: Puedes probar aplicando un poco de lubricante en la cerradura para ayudar a que la llave gire con mayor facilidad. Puedes utilizar un spray lubricante o incluso un poco de aceite de cocina.
- Comprueba si la cerradura está atascada: A veces la cerradura puede estar atascada debido a la acumulación de suciedad o a algún objeto que se haya quedado atascado en su interior. Puedes intentar limpiar la cerradura con un paño húmedo o con un cepillo de cerdas suaves.
- Intenta mover la puerta mientras giras la llave: En ocasiones, la puerta puede estar mal alineada, lo que dificulta que la llave gire correctamente en la cerradura. Intenta mover la puerta hacia arriba o hacia abajo mientras giras la llave para ver si esto facilita la apertura.
Si ninguno de estos pasos funciona, es posible que necesites llamar a un cerrajero para que te ayude a abrir la puerta de forma segura y sin causar daños. También puedes intentar con otro juego de llaves o con una llave de repuesto para ver si el problema es con la propia llave.